Para horno

Uno de los aspectos que hay que tomar en cuenta al adquirir estos productos es el espacio que dispondremos para ellos en la cocina.

Es esencial que repartan el calor de forma uniforme en su interior, tanto arriba como abajo, así nuestros platillos van a quedar bien cocidos.

En la antigüedad, cuando la tecnología no tenía sitio alguno, eran elaborados de adobe y se calentaban a través del fuego de leña.

Si bien tuvieron origen hace miles de años, prosiguen siendo de enorme utilidad por lo que van evolucionando transcurrido un tiempo.

Los para horno de forma tradicional eran elaborados en barro y el comburente era la leña, aún hay muchos de estos, pero no son tan eficaces.

Líquidos y sólidos, puedes calentar prácticamente cualquier alimento que desees en unos pocos minutos e inclusive en unos pocos segundos en dependencia del comestible.

Los para horno de vapor son más ecológicos, nos dan comestibles saludables, contribuyen con el ahorro energético y además, son sencillos y veloces de utilizar.

Si eres un defensor de la ecología y deseas contribuir al ahorro enérgico, la mejor opción para preparar tus comidas es de vapor.